Dedicado a: Xbox360 en general; Josevi, mi instructor, en partícular.
En mis reflexiones sobre las consolas de la nueva generación, cada vez me quedo mas impresionado. Podemos aplicarlo también a Ps3, pero subjetivamente elijo la joya de la corona de Microsoft, porque, basicamente, es la que tengo yo (xD).Yo no sé hablar de los rasgos técnicos de las consolas, no tengo ni idea. Yo voy por otro camino. Ayer terminé de convencerme, y de emocionarme de que yo también puedo habitar esa idea que os propongo a continuación: la del Mundo Infinito.
Todos sabemos que nuestro planeta es finito, tiene límites. Y es que aunque muchas partes de la Tierra no hayamos pisado y no pisaremos jamás, están ahí, con un rasgo característico, el de tener una grandeza determinada.
Fue ayer cuando comprendí que no pasaba lo mismo con lo que se esconde detrás de esta caja blanca o negra, y que es muy, muy grande... tanto, que dejamos por sentado que estamos hablando de algo enorme: Un mundo infinito.
Lo que empieza como una ilusión por tenerla, y pasa por el día en que todos vamos a la tienda a comprarla, la vemos de lejos, a la que será nuestra próxima acompañante en aventuras inolvidables, desemboca, para mi, en la siguiente reflexión.Imagina por un mundo estar recorriendo los oscuros y derruidos escenarios de un juego de terror. Estas tu solo, expuesto a morir en cualquier momento. En ese momento, tras avanzar, decides jugar a otra cosa. Ahora imagínate en una montaña de la Valhalla en el Halo3. Tú y otras 4 personas que no conoces de nada, frente a otras 5 que igualmente son desconocidas, en un duelo por conseguir ascender poco a poca en una escala nada fácil de ascender.
Ya estás muy lejos de los escenarios del juego de terror del principio, ahora estás en un escenario verde, relajante. Después, decides jugar, pongamos por el ejemplo, al juego 'Uno' (Conmumente llamado 'el hijo-puta'). Conocerás a personas quizás a través de la Cám de la consola. Ya son menos anónimas, o por lo menos, conoces sus caras. Ya estás a millones de kilometros del escenario terrórifico y del de 'Halo3'. Ahora te dispones a ganar una partida de cartas y, si también puedes de paso, establecer una conversación en idiomas diversos.Has terminado tu partida. Dile adios a ellos porque hay muchas papeletas de que no vuelvas a encontrartelo en este camino, en este Mundo Infinito. Un mundo donde cada vez, en forma de Juegos se va a ampliando un mundo ficticio tan respetado como querido por sus fieles. Un mundo que nunca tocará bordes, ni "físicos" ni sentimentales. Cada lugar es una emoción, te dejará huella. Imagina entonces recorrer un camino cuyo final nunca verás, y no desearás ver.
De repente, deseas adentrarte en las profundidades de Rapture, con un protagonista anónimo: tú mismo. Hablamos de 'Bioshock'. Ahora, por decirlo así, estás por debajo de aquellos lejanos compañeros de mesa de 'Uno', tan lejos o mas de Valhalla y los escenarios donde tuviste que ir alerta.
En ese momento, deseas reflexionar. Eres un caminante que no te has movido de tu habitación, pero has vivido experiencias inolvidables, preciosas, y otras, como no, no tanto. Se crean un cúmulo de sensaciones, que hacen que llegues al punto para el que, sin saberlo, los fabricantes de la consola pretendían que llegases: A disfrutarla.
Ellos no se plantearon quizás lo que saldría de tanta innovación y perfeccionamiento en sus consolas y sus juegos, pero han llegado a ese puerto, por lo que deben contar con nuestro agradecimiento.
Y no hace falta una vida entera para comprobar si es cierto lo que digo. Basta con que recuerdes lo que aquí te planteo, en el transcurso de una tarde. Entra un sol primaveral (Por estas fechas, claro está) por la ventana, y adorna una escena que será testigo de que veas si es o no cierto a la conclusión a la que yo he llegado.
Lo bueno de algo así, es que SIEMPRE puedes volver hacia atrás. No es como el destino, mas complicado de hacerle retroceder. Puedes volver al escenario terrorífico sin pasar por la Valhalla, y que la máquina busque sustituto a unos compañeros con los que pasastes un rato de tu vida.
Esto es, señores, las Consolas de la Nueva Generación. Mágicas, sencillamente.
Ya tengo un nuevo propósito: Sacarle el máximo partido a mi Moreniya, para que cada momento con ella, compruebe y me reafirme en que lo que aquí digo hoy, es verdad. Y de paso, emocionarme por haber sacado esta conclusión, porque de verdad es impresionante el poder tener algo así y disfrutarlo. Imaginándose que mas allá de las montañas de la Valhalla están todos esos escenarios donde pasamos ratos en compañía de la consola, y que nunca dejarán de esperarnos, en silencio.











